logo IPPC
      FAQ            Iniciar sesión

DESTACADO: Entrevista con John Hedley

Posted on Vie, 22 Dic 2023, 12:00

Responsive image

En 1989, John Hedley fue uno de los pioneros que desarrollaron la primera Norma Internacional para Medidas Fitosanitarias (NIMF). La contribución de John, antiguo presidente de la Comisión de Medidas Fitosanitarias (CMF), a la CIPF se remonta a varias décadas. Su dedicación desde los primeros días de las primeras NIMF, a las cuestiones fitosanitarias en torno a los contenedores marítimos, ha dejado constancia y ha dado forma a muchas facetas del trabajo actual de la CIPF.

La Secretaría de la CIPF se reunió con John, que actualmente está jubilado en su Nueva Zelandia natal.

CIPF: En resumen, ¿qué proceso condujo hacia la adopción de la primera NIMF y cuál fue su papel en dicho proceso?

John: En 1989, presenté el primer borrador de los Principios de cuarentena fitosanitaria en relación con el comercio internacional en la 16ª sesión de la Comisión de Protección Vegetal para Asia y el Pacífico (APPPC) en la República de Corea. En 1990, fue modificado en una Consulta internacional de expertos de la APPPC y, en 1991, por un grupo de trabajo de expertos de la FAO y por otras organizaciones regionales de protección fitosanitaria (ORPF).

La Cuarta Consulta Técnica entre ORPF, celebrada en 1992, recomendó que el documento Principios de cuarentena fitosanitaria se presentara a la Conferencia de la FAO. Junto con Niek van der Graaff, entonces secretario de la CIPF, presenté el documento para su aprobación por la 27.ª Conferencia de la FAO en 1993, tras haber sido aprobado previamente por el Consejo de la FAO y el Comité de Agricultura de la FAO (COAG). Este procedimiento con participación de los órganos de la FAO se aplicó antes de que se creara la Comisión Interina de Medidas Fitosanitarias (CIMF). Junto con los Principios, se presentó a la Conferencia de la FAO la propuesta de composición del Comité de Medidas Fitosanitarias (utilizado antes de que se estableciera el Comité de Normas) y un procedimiento para la elaboración de normas.

CIPF: ¿Por qué necesitaba entonces el mundo una norma fitosanitaria?

John: Era la época en que se estaba estableciendo la aplicación del Acuerdo sobre la Aplicación de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias (MSF). Las otras dos "hermanas" (la Organización Mundial de Sanidad Animal [OMSA] y el Codex Alimentarius), tenían normas así que la contribución de la FAO a través de la CIPF tenía que tener normas.

En la Ronda Uruguay de Negociaciones Comerciales Multilaterales del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), se reconoció que las restricciones de cuarentena injustificadas podían utilizarse para limitar la libre circulación del comercio. Los Miembros del GATT insistieron en la transparencia de los motivos de las medidas de cuarentena vegetal y en la necesidad de mejorar la situación mediante la armonización. Esto se refería al "Establecimiento, reconocimiento y aplicación de medidas sanitarias y fitosanitarias comunes por diferentes Miembros", y a que "en materia de preservación de los vegetales, las normas, directrices y recomendaciones internacionales elaboradas bajo los auspicios de la Secretaría de la CIPF, en colaboración con las organizaciones regionales que operan en el marco de dicha Convención Internacional" no deberían ser impugnables.

CIPF: ¿Qué destacaría de sus décadas de servicio a la comunidad fitosanitaria?

John: Como primer coordinador de la Secretaría de la CIPF y en colaboración con Niek van der Graaff, apoyé firmemente el desarrollo del texto revisado de la CIPF, establecí un programa de trabajo y grupos de trabajo para desarrollar varias NIMF, y creé el Grupo de Trabajo del Glosario, que ahora es el Grupo Técnico sobre el Glosario.

Como primer presidente de la CIMF, precursora de la CMF, iniciamos la Evaluación de la Capacidad Fitosanitaria (ECF). El Ministerio de Relaciones Exteriores y Comercio de Nueva Zelandia (MFAT) proporcionó fondos para identificar capacidades y áreas específicas de necesidad en los sistemas fitosanitarios de los países en desarrollo. Con este fin, elaboramos un cuestionario que permitió a los países en desarrollo evaluar sus capacidades y seguir desarrollando un plan nacional. Este proceso también permitiría a los países en desarrollo justificar las solicitudes de asistencia técnica. El proyecto fue iniciado por Godwin Balasingam y dos científicos de alto nivel de la Universidad de Massey (Nueva Zelandia). Posteriormente, Felipe Canale, David Nowell, Orlando Sosa y muchos otros siguieron desarrollando la ECF.

En cuanto a los nuevos proyectos de normas, me preocupaba que los funcionarios de la ONPF no tuvieran la oportunidad de hacer preguntas sobre ellos. El MFAT aportó fondos para una reunión con los países del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), mientras que la CIPF añadió fondos para otros miembros de la Comisión de Protección Vegetal para Asia y el Pacífico (APPPC) que no formaban parte del APEC. Lo hicimos con éxito durante dos años y otras ORPF siguieron el ejemplo de la APPPC. Más tarde, la Secretaría de la CIPF gestionó las reuniones, que ahora conocemos como talleres regionales anuales de las ORPF.

Como antiguo miembro del Comité de Normas, realicé aportaciones al Glosario de Términos Fitosanitarios durante 22 años. También hice mucho hincapié en la aplicación de la NIMF y en la necesidad de una NIMF que se ocupe de la contaminación de los contenedores marítimos.

CIPF: ¿Cuál es su mensaje para la comunidad fitosanitaria, a la luz de las más de 40 NIMF (más anexos y suplementos) aprobadas hasta la fecha?

John: La CIPF ha ido forjando más asociaciones con otras organizaciones, y esto debe continuar. La sanidad vegetal no puede funcionar por sí sola, es un componente de muchas otras actividades.

Con la digitalización, se puede proporcionar más información a las ONPF sobre la situación de la plaga de los artículos que se comercializan o se mueven como producto del comercio. Podrían transmitirse más inspecciones, con sus resultados, junto con los artículos exportados. Esto se aplica especialmente a los contenedores marítimos.

Las nuevas técnicas de cotejo de datos, como los grandes modelos de lenguaje (LLM) y la IA, deberían permitir el desarrollo de cientos de normas sobre productos vegetales que será necesario elaborar. Se deberán tener en cuenta los requisitos de los distintos países y que dichos requisitos cambiarán a medida que cambie el clima de cada país.

Share this news

Subscribe

  • Don't miss the latest News

    If you have already an IPP account LOGIN to subscribe.

    If you don't have an IPP account first REGISTER to subscribe.

Subscribe to the IPPC Newsletter