El nuevo texto revisado de la CIPF se aprobó en 1997. La revisión se llevó a cabo para que el instrumento reflejara los conceptos fitosanitarios contemporáneos y la función de la CIPF en relación con los acuerdos de la Ronda Uruguay de la Organización Mundial del Comercio, en particular el Acuerdo sobre la Aplicación de Medidas Sanitarias y Fitosanitarias (el Acuerdo MSF).
El Acuerdo MSF en particular señala la CIPF como organización que proporciona normas internacionales para las medidas que aplican los gobiernos a fin de proteger sus recursos vegetales de plagas nocivas (medidas fitosanitarias; a la vez que se garantiza que las medidas fitosanitarias se justifiquen técnicamente y no se utilizan como obstáculos injustificados al comercio internacional.
Si bien la CIPF tiene importantes consecuencias en el comercio internacional, su objetivo central es la cooperación internacional para la protección fitosanitaria. Hay numerosas formas de cooperación en el ámbito de la Convención. Su aplicación a las plantas no se limita exclusivamente a la protección de las plantas cultivadas ni al daño directo producido por las plagas. El ámbito de la Convención se extiende a la protección de la flora cultivada y natural así como a los productos de origen vegetal e incluye los daños directos e indirectos causados por las plagas.
El nuevo texto revisado de la CIPF (1997) hace énfasis en la cooperación y el intercambio de información, con el objetivo de lograr la armonización mundial. Además de formular las responsabilidades nacionales de protección fitosanitaria, también trata elementos importantes de la cooperación internacional para la protección fitosanitaria y el establecimiento y uso de medidas internacionales para normas fitosanitarias (NIMF).
Uno de los principales objetivos de esta revisión fue incrementar la eficacia de la ejecución. A este respecto, la FAO estableció la Secretaría de la CIPF en el Servicio de Protección Vegetal, de la División de Producción y Protección Vegetal de su Departamento de Agricultura. El programa de trabajo de la CIPF se concentra en tres ámbitos principales, a grandes rasgos: